15 jun 2007

CRACOVIA: El alma de Polonia. Abril 2002.


Cracovia (en polaco Kraków) es la capital del voivodato de Pequeña Polonia (Województwo małopolskie) y una de las ciudades más grandes, antiguas e importantes de Polonia. Con una población de 760.000 habitantes (1,4 millones con las comunidades cercanas), está situada en las márgenes del río Vistula y en la colina Wawel.
El centro histórico fue declarado patrimonio de la humanidad en 1978.
Tiene una arquitectura muy rica, con bellos ejemplos de arquitectura renacentista, barroca, y gótica. Las catedrales y los palacios de Cracovia muestran una riqueza de color con detalles arquitectónicos como vidrieras, pinturas y esculturas.
Los edificios más destacados de la ciudad son el
Castillo Real y la catedral en la colina Wawel, el barrio medieval Stare Miasto (Pueblo Viejo) con su bella plaza; la plaza de mercado (200 metros cada lado); docenas de viejas iglesias y museos; los edificios del siglo XIV de la Universidad Jagellónica; y Kazimierz, el centro histórico de los judíos de Cracovia.
La basílica gótica de Santa María, construida en el siglo XIV, limita con la plaza del mercado, y tiene un altar muy famoso de Veit Stoss. Cada hora, se oye el toque de trompeta desde la torre de la catedral.

Visita panorámica a Cracovia: Guetto judío, donde se rodaron algunas escenas del film de Spielberg: La lista de Schindler, restaurantes judíos, monumento a las víctimas, cementerio judío y sinagogas.
Plaza del Mercado, con la Lonja de los Paños, barbacana (restos de la muralla medieval), café en
Kawiarnia Jama Michalika, famoso en la ciudad, universidad, iglesia de los franciscanos, palacio episcopal (donde vivió Juan Pablo II en su época de obispo de Cracovia).


Tiempo libre, para compras (música, artesanía) y ver con más detalle la plaza.
Cena en cellería
Cherubino (taberna típica polaca). Cerveza en la plaza. Sigue el frío.

Al día siguiente, vi sita a la colina de Wawel: Catedral de Cracovia, palacio renacentista, paseo por las murallas (monumento al dragón), iglesia de Sta. María, con el famoso altar que se abre y escuchamos al trompetero de la torre (lo hace cada hora).
Tiempo libre: Volvemos a algunos lugares para verlos mejor, como el guetto judío, el cementerio, las sinagogas. Más fotos en la Plaza del Mercado. Últimas compras y comemos una salchicha en los puestos de la plaza. Por fin vemos el sol.


Por la tarde, visita a las Minas de Sal de Wieliczka, una maravilla única en el mundo, monumento de la UNESCO. Tuvimos de guía a la simpatiquísima Beata, que nos acompañó durante el recorrido y nos explicó muy bien todo el lugar.
                

Estas minas incluyen un recorrido turístico de 3,5 kilómetros que contiene estatuas de personajes míticos e históricos, esculpidas en la roca de sal por los mineros. Incluso los cristales de los candelabros están hechos de sal. También hay cámaras y capillas excavadas en la sal, un lago subterráneo y exposiciones que ilustran la historia de la minería de la sal.



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